La vida está llena de decisiones y nosotros nos arriesgamos por elegir la más acertada en el momento oportuno.
Hay decisiones sin importancia y decisiones en las cuales, preferirías no haberte visto metido.
Hay veces que hay que tomar la decisión de dejar a alguien querido, algo que conoces y es bueno por lo desconocido. Tienes que arriesgar tu 100% porque, para ganar, tienes que arriesgar, o eso dicen. Y, aunque a veces no encuentras solución instantánea, sigues rezando para que llegue, porque no te hayas equivocado; sigues rezando por haber decidido bien.
Y son todas estas decisiones, sobretodo, las que hacen que seamos únicos y especiales, al fin y al cabo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario